Una semana de estudio que permitió compartir vida, talento, experiencias, sueños; una semana que reunió a Agentes de Pastoral Juvenil de Mexicali, Tijuana, Guadalajara, Morelia, Irapuato, Sahuayo, Celaya, Querétaro, Uruapan, Toluca y ciudad de México; una semana en la que nos descubrimos como familia de Dios.
En la apertura el H. Miguel Ángel Espinosa Barrera, Coordinador del Equipo Provincial de Pastoral Educativa (EPPE) nos invitaba a ser Buena Nueva para los demás y a poner en manos de María la semana que comenzábamos con la intención de formarnos para atender mejor la misión pastoral que cada uno realiza.
El Diplomado de Pastoral Juvenil que promueve la Provincia Marista de México Central y la Universidad Marista de Querétaro, en donde como discípulos de Jesús, buscamos desarrollar en los agentes de pastoral juvenil la capacidad de profundizar y reflexionar las realidades juveniles y el contexto social en el que se mueven, que les lleve a ser protagonistas de la acción evangelizadora en la iglesia con una actitud crítica de su labor pastoral.
Los destinatarios de este Diplomado son jóvenes de bachillerato y universidad, así como profesores que acompañan la animación de la Pastoral Juvenil de sus respectivos lugares de origen, tanto en colegios maristas, diócesis, misiones o en el Proceso Juvenil Vocacional “PROJUV” en el norte de México.Conforme los días pasaban el grupo se iba consolidando, los espacios de convivencia, oración, reflexión eran más allá del aula, en pequeñas “retas” de vóley, juegos de mesa, un rally, se construía una iglesia joven con rostro marista.
En una caminata, se hizo posible el encuentro con los que día a día están en las calles, con aquellos que hace tiempo no reciben un gesto de aprecio y amor. Algunos respondían ¿quién es Jesús? otros más en la alegría compartían un instante de felicidad, algunos más nos dejaban ver la pasión con la que viven, y cómo es posible ser signo de vida para los demás.
Veintiún jóvenes terminaron su Diplomado y en dos veranos cursaron los siguientes módulos: Desarrollo Humano, Realidades Juveniles, Pedagogía Marista, Espiritualidad, Cristología, Acompañamiento Juvenil, Creatividad, Planificación Pastoral.
Al finalizar la experiencia se agradeció a todos los presentes la oportunidad de formar comunidad ya que a través del espíritu de familia, el ambiente de trabajo y la responsabilidad de cada uno, hicieron posible en todos el crecimiento humano y espiritual, al mismo tiempo mismo que fortalecimos los lazos de amistad e intercambio entre los Agentes de Pastoral Juvenil.
Fraternalmente
Carlos Ulises Centeno López
Coordinador Provincial de Pastoral Juvenil
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